01 Aug

Uno de cada tres niños españoles no se cepilla los dientes a diario. Sin embargo, el cuidado de la salud bucodental es fundamental y debe comenzar desde los primeros meses de vida del menor. Este artículo describe cinco pasos para lograr que el niño aprenda la importancia de cuidar sus dientes y pueda hacerlo por sí mismo, cuando sea capaz. Describe también, con un vídeo, cuál es la forma correcta de lavarse los dientes.

Esta tarea a veces puede resultar un poco complicada, por eso habrá que hacerlo de la manera más divertida posible. Algunos posibles trucos para motivarles pueden ser estos:

1. Cómprales un cepillo eléctrico infantil divertido: Ahora los hay con dibujos de sus princesas preferidas o los súper héroes de moda. Incluso algunos tienen luz y música para que estén el tiempo necesario. No olvides que cada 3 meses hay que cambiarlo.

2. Ponles música o cantar vuestra canción favorita: Hay algunas canciones, incluso videos musicales para facilitar esta tarea y hacer de ella el momento más gracioso del día. Te interesa Turbina sin luz.

3.Utilizando un reloj de arena como temporizador, suelen ser de dos minutos, tiempo aconsejable para cepillarse los dientes. Podéis hacer una carrera y a ver quién es más rápido y eficiente.

4. Enséñales la manera correcta de cepillarse con algún juego y una tabla de cepillado como esta, para que se vaya motivando. No olvidéis, que siempre tenéis que comprobar que lo han hecho bien y repasarles en caso de que sea necesario. En nuestra tienda online Athenadental puedes ver todos los pieza de mano dental, Lámpara de blanqueamiento dental, turbina dental, Lámpara de fotocurado, los cuales facilitarán tu trabajo en tratamientos dentales.

5. Juegos y cuentos para aprender a lavarse

Los cuentos y los juegos son las mejores herramientas para motivar a los niños, en particular cuando sienten que cepillarse los dientes es aburrido. Tanto si el pequeño no quiere lavarse los dientes, como si después de empezar se aburre y quiere abandonar antes de terminar, hay que aplicar la imaginación. Se puede ofrecer un juego o contarle un cuento. Sirven las historias en las que los personajes sufren las consecuencias de no cepillarse los dientes.

El anterior.

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